20 agosto, 2012. Pamplona.
Comienza una andadura en el mundo del billar que se ha ido fraguando a lo largo de los últimos catorce meses y que responde al sueño de toda una vida. Después de muchos años de práctica, viajes y competiciones, se nos brinda la oportunidad de desarrollar y mostrar el billar tal y como debe ser practicado. Como lo que es: un deporte.
Ésta y no otra es la razón que nos ha empujado a fundar la Academia de Billar Cachute. Todos los aficionados hemos jugado en multitud de lugares que no estaban preparados para que el jugador pueda entrenar como es debido o recibir la ayuda necesaria para mejorar en una disciplina tan esquiva. Tan fundamental nos ha parecido este hecho que se ha convertido en nuestro “santo y seña”, el leit motiv, a la hora de diseñar y distribuir el espacio del que disponemos o escoger el sensacional material, perfecto y adecuado para nuestro fin; jugar al billar en las mejores condiciones posibles
El ejemplo recibido por experiencias pasadas nos demuestra que cuando se dispone del material adecuado, los resultados llegan. A Patxi Sánchez y el salón Liverpool le debemos el haber contado con mesas de competición de pool y carambola. Con ellas se lograron títulos a nivel nacional en primera categoría. A Abel del Brío y la Sala Carlos III, por desgracia cerrado ya hace años, siempre tendremos que agradecerle el haber podido jugar y mejorar en las primeras mesas de competición de carambola que conoció nuestra ciudad. A ambos les debemos nuestra gratitud y reconocimiento.
Con nuestro proyecto nos proponemos ir un paso más allá. Introducir el Snooker en una ciudad y comunidad que no lo conoce en la práctica pero lo sigue ávidamente por televisión.
En Marcilla, localidad de la Ribera Navarra, se puede ver desde hace muy poco tiempo la primera mesa de esta temible modalidad. De la mano de Javier Cambra y Trevor se inició una andadura que no se puede clasificar de otra manera que “gran éxito”. Recogemos el testigo de todos los citados.
La Academia. Un local único para jugar al billar. Su exclusividad se basa en lo específico del lugar. Se ha levantado con el único propósito de jugar al billar. Aprenderlo, aprehenderlo y practicarlo. Contar siempre con la ayuda profesional de un monitor. Asistir a clinics con jugadores y profesionales que acudirán y nos enriquecerán como jugadores.
El resto es el futuro. Las bases son inmejorables. En nuestra mano está llegar a todo el que lo desee para promocionar este fabuloso hobbie, pasatiempo, juego o, por supuesto, DEPORTE!!!